La justicia, que está a cargo de la emisora desde que se dictaminó su quiebra a fines de 2017, puso fecha para subastar una de las radios más tradicionales del país. El 12 de julio será el remate, precio base: doce millones de dólares
La intención sería venderla como ‘unidad en marcha’. El precio incluiría el edificio de la calle Arenales al 2.400, las licencias de radiodifusión de a explotación dese tratará de vender la explotación de Rivadavia, en donde hoy trabajan 100 empleados, como una unidad en marcha y en block. Entre los activos, se ofrece el edificio de Arenales al 2.400 donde actualmente funciona junto a las licencias de radiodifusión de ambas frecuencias, AM 630 y FM 103.1, Radio Uno, así como equipos, maquinarias, antena transmisora y bienes muebles.
La Comisión Interna de los 100 trabajadores de la emisora anunció una movilización el 12 de julio al juzgado para garantizar su fuente de trabajo, que vienen manteniendo a pesar de cobrar su sueldo con retraso desde el año pasado.