Organizaciones miembro de la CTEP, junto a cooperativas y vecinos, se reunieron a partir de las cinco de la tarde para tender las mesas sobre avenida Entre Ríos, de cara a la Plaza de los dos Congresos en donde se presentaron distintas bandas para amenizar la fiesta.
Hubo un menú pensado para 1.500 o 2.000 personas. La Unión de Trabajadores de la Tierra y el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) llevaron las verduras y parte de la carne. Hubo frigoríficos recuperados que llevaron todo lo necesario para la fiesta: pollo, lechón, carnes frías y ensaladas.
Antes de la cena se leyó una oración ecuménica, con representantes católicos, evangelistas y musulmanes. Tal como expresó Rafael Klejzer, responsable de la CTEP Capital: “El deseo es terminar este año de mucha lucha, muy duro para el pueblo argentino, compartiendo la mesa. Sabemos que tenemos por delante otro año de mucha pelea, pero que contiene la esperanza de que este gobierno se vaya. Vamos a hacer un planteamiento muy claro de la agenda social, inexistente para este gobierno, y a traer esperanza”.
No solo el mayo francés cumplió 50 años en el 2018, también pasó medio siglo desde que los Rolling Stones grabaron el disco ‘Banquete de Pordioseros’. En un mundo de revueltas sus canciones reflejaban ese raro entrevero entre la Biblia o Satán, manifestaciones, y sexo. Temas universales, hoy tan de moda como ayer. En una de sus letras dice: “Por todas partes escucho el sonido de pies marchando y cargando, muchacho,/ porque el verano está aquí y es el momento apropiado para pelear en la calle, muchacho”.
La Nochebuena porteña tuvo a esos muchachos festejando en la calle. Quien se acercó pudo comprobar que la pobreza no da lástima, si se organiza es una ráfaga de esperanza y alegría.