Mientras el país seguía con atención la crisis desatada en el seno del gobierno, pasaba inadvertida la noticia del nuevo dueño de Radio del Plata, una de las principales emisoras de la ciudad de Buenos Aires. Esta semana se supo que un controvertido empresario de la carne la había comprado. Se trata de Ricardo Bruzzese, quien siempre se ufanó de tener excelente relación con Cristina Fernández de Kirchner, y durante su gobierno, gracias a la amistad que lo une a Guillermo Moreno, por entonces Secretario de Comercio, participó del armado del programa estatal “Carne para todos” que consistía en distribuir cortes a precios populares en las carnicerías.
Fue por esos años en los que su carrera dio un salto y también sus ganancias. Los perspicaces indican que no sería casualidad el nombre de una de sus principales carnicerías: “Don Corleone”. También resaltan su gusto por los trajes de seda, los autos de primer nivel y sus históricas diferencias con otro referente del ramo, Alberto Samid.
Como es de imaginar, Bruzzese coqueteó con la política. En el 2011 fue precandidato a la Intendencia de la Matanza. Feroz interna desatada luego de la muerte de Ballestrini en la que se enfrentaron con amenazas y algún tiro Fernando Espinoza y el referente de ‘Carne para Todos’. Para evitar que la cosa pasara a mayores, Cristina Fernández de Kirchner logró que su aliado de la carne bajara su candidatura y le abriera el paso a Fernando Espinoza. Casualidad, o no, varios de los protagonistas de esta semana rondaban el territorio matancero en ese tiempo. Juan Mazur era el Ministro de Salud de Espinoza y en el 2013 inauguraba junto a la presidenta el Hospital Público Alberto Ballestrini.
En ese mismo año, en el que Cristina recorría la Matanza junto a Manzur y Espinoza inaugurando obras, el empresario kirchnerista Ricardo Bruzzese, compraba uno de los principales frigoríficos de la provincia, el frigorífico Penta de la localidad de Quilmes que estaba casi en quiebra, además era secretario del Consejo Argentino de Productores (CAP), considerado un “club de amigos” del secretario de Comercio que funcionaba en el Mercado Central y era presidido por el ruralista Ider Peretti.
Instalado en Quilmes, su nombre volvió a salir en los diarios el año pasado cuando los trabajadores del Penta mantuvieron un largo conflicto por falta de pago y lockout patronal en plena pandemia. Despidió a parte del personal violando la prohibición del Presidente, y el 11 de abril de 2020 hubo una feroz represión que terminó con más de veinte heridos. Por ese entonces, la intendenta ya era Mayra Mendoza que, a pesar de repudiar la violencia de la fuerza de seguridad, quedó golpeada por ese episodio.
Desde la izquierda lo señalan como un experto en vaciar frigoríficos y quebrar comisiones internas.
Hoy, Ricardo Bruzzese inicia un nuevo recorrido, otra etapa, en la que deberá llevar adelante un medio de comunicación.