Todo indica que la confrontación y el conflicto excitan los ánimos del presidente. Cuanta más oposición, mayor provocación oficial. De esta forma está manejando el conflicto generado por la falta de diálogo con los trabajadores aeronáuticos que exigen recomposición salarial.
Al día siguiente de que se reuniera la Mesa Nacional del Transporte, conformada por todos los gremios del transportedel país, -que integran las centrales sectoriales como la CATT y la UGATT– quienes este jueves decidieron convocar a un plenario para el 8 de octubre donde se pondrá a consideración un paro nacional para el 17 de octubre de 24 horas; el vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció que Milei firmará un decreto para privatizar Aerolíneas Argentinas. Decreto que deberá obtener la aprobación del Congreso.
La decisión de encarar un plan de lucha fue tomada por los sindicatos transportistas luego de que se reunieran el jueves 26 de septiembre los Secretarios Generales Juan Pablo Brey (Aeronavegantes); Omar Maturano y Ariel Coria (La Fraternidad); Mario Caligari (UTA); Pablo Moyano y Omar Pérez (Camioneros); Juan Carlos Schmid (FeMPINRA); Pablo Biró (APLA); Emiliano Gramajo (AOITA); Javier López (Seamara) y Raúl Durdos (SOMU), entre otros.
Al finalizar la misma, dieron a conocer un comunicado en el que afirman: “Los ejes de nuestros reclamos son tres: la falta de recomposición salarial; la libertad sindical y la defensa de la Soberanía Nacional sobre los distintos modos de transporte. La Mesa se pronunció por la recuperación del salario de los gremios del transporte que perdieron en forma general el poder adquisitivo desde que asumió Milei. Los distintos gremios presentes coincidieron en que desde inicios de este Gobierno se persigue a los dirigentes y se busca criminalizar la protesta social, que está amparada en la Constitución Nacional y en convenios de las máximas organizaciones Internacionales que regulan el trabajo”.
Por su parte, la UTA, el gremio de los colectiveros, lanzó un paro nacional de 48 horas para el próximo lunes que fue desactivado desde el punto de vista legal dictaminando la conciliación obligatorias por 15 días.
¿Podrá el gobierno mantener una política que hace oídos sordos a todo tipo de reclamos laborales o sociales? Su propio bloque se está resquebrajando ante el dogmático principio de ‘deficit cero’ que no admite discusión alguna: todo lo que se haga sin miras de inversión en el mercado es un gasto superfluo. A pesar de algunos traspiés, esta semana logró aprobar una reforma laboral que flexibiliza las indemnizaciones y criminaliza la protesta en las puertas de los establecimientos.
Octubre será un mes en el que nuevamente subirá la tensión frente a un país que mira azorado que más de la mitad de su población entró al rango de pobreza, es decir, no tiene los ingresos básicos para vivir con dignidad.
Desde las universidades nacionales esperan convencer al presidente de que el gasto en educación es una inversión a futuro y esperan que Milei desista de vetar la Ley de Presupuesto Universitario. En tanto, organizan una nueva marcha a favor de la educación pública prevista para el 2 de octubre.
Los estatales se mantienen en estado de alerta y movilización frente a los 65.000 despidos anunciados antes de fin de año. Objetivo que se está llevando a cabo en cuenta gotas.
Científicos del Conicet y CONEA advierten el drama que significa desbaratar programas como el llevado adelante por Atucha para la producción de pequeños generadores que aliviarían la situación energética que puede entrar en crisis frente a un verano riguroso. Lejos de cambiar de política, el gobierno ya está anunciando corte programados a partir de diciembre o enero.
Conflictos grandes y pequeños que van sumándose y resultan imposibles de enumerar en una sola nota. En la CGT se debaten dos estrategias que por el momento no se sabe si son alternativas o complementarias: la de no romper el diálogo y la de salir a la calle y convocar a un paro general. Por ahora, la cúpula cegetista mantiene la unidad y deja libertad de acción a los gremios y confederaciones. Los más combativos apuntan a convertir el paro de transportistas en un paro general en una fecha significativa para los trabajadores: el 17 de octubre. Mientras los ‘dialoguistas’ se reunirán este lunes en la Casa Rosada con Guillermo Francos para acercar posiciones.